En 1985, muchos de nosotros nos quedamos enganchados a las pantallas de cine viendo como el DeLorean permitía a los protagonistas de “Regreso al Futuro” viajar en el tiempo gracias a la tecnología del condensador de flujos. Obviamente, aquello era ciencia-ficción y, hasta la fecha, nadie ha podido conseguir tal logro. Aun así, las tecnologías aplicadas al sector de la automoción continúan dando pasos de gigante año tras año y, aunque no podamos desplazarnos en el tiempo, algunas de las innovaciones que van apareciendo bien podrían calificarse casi como ciencia-ficción.
Estas son algunas de las innovaciones tecnológicas que las compañías automovilísticas están poniendo en el mercado –o tienen previsto hacerlo en los próximos meses– y que, a más de uno, dejarán con la boca abierta.
Coches que conectan con nuestras emociones: Concept-i de Toyota
Buscar una relación más “humana” con la tecnología, centrada en ofrecer al conductor y a los acompañantes una mejor experiencia, más adecuada a sus emociones es el objetivo del Concept-i de Toyota, que utiliza un avanzado sistema de inteligencia artificial que anticipa las necesidades de los ocupantes del vehículo.
El potente sistema de inteligencia artificial del Concept-i aprende del conductor y, de manera progresiva, va construyendo una relación con él. La tecnología implicada en este proceso va midiendo las emociones de su propietario, en relación con los distintos momentos del día o con los lugares que recorre.
De este modo, es capaz de ofrecer una experiencia de usuario única. Pero no solo eso, ya que también pone esta tecnología al servicios de la seguridad. ¿De qué modo? Pues mediante avisos visuales y táctiles, Concept-i favorece la capacidad de respuesta del piloto. Ya sea en modo de conducción autónoma o manual, la tecnología supervisará de manera constante la atención del conductor y el estado de la carretera para potenciar la implicación del conductor y prestarle ayuda ante condiciones peligrosas.
La interfaz que sirve de sustento a este sistema ha sido bautizada como “Yui” y, aunque de momento no es más que un prototipo, deja claras las bases del futuro de la marca en esta carrera tecnológica.
“Hola, me llamo Sayer y soy el volante del futuro”
Con estas palabras acaba de presentar Jaguar Land Rover su volante inteligente y conectado en el evento Tech Fest celebrado en Londres. Este nuevo concepto de volante, del que podremos disfrutar dentro de unos cuantos años –a partir de 2040–, vivirá en casa del conductor y, aplicando la inteligencia artificial será capaz de llevar a cabo diferentes tareas.
El concepto conlleva un nuevo sistema de conducción, donde no seríamos propietarios del vehículo. “Imagina un futuro de vehículos autónomos, conectados y eléctricos donde no eres propietario de un único coche sino que puedes elegir el que quieras en el lugar y el momento en que lo necesites”, aseguraron los responsables de marca. Es ahí donde entraría en juego Sayer, el único elemento del vehículo que obraría en nuestro poder (bien adquirido en propiedad o con la opción de compartir el vehículo con otros miembros de un club de vehículos bajo demanda), y a quien haríamos partícipe de nuestras necesidades. “¿Necesitas estar en una reunión a dos horas de casa mañana a las 8 de la mañana? Simplemente pregunta a Sayer desde el confort de tu hogar y el trabajará para que, cuando te levantes, el coche autónomo acorde a tus necesidades estará esperando en tu puerta e, incluso, te aconsejará qué partes del viaje puedes disfrutar conduciendo tú mismo”, añadieron.
¡Fuera cables! Carga por inducción para los coches eléctricos con el sistema BMW Wireless Charging
La idea de la carga por inducción para vehículos eléctricos es casi tan antigua como el propio coche eléctrico pero, a partir de 2018, será una realidad. BMW Wireless Charging es la tecnología que, inicialmente, estará disponible para el BMW 530e iPerformance y, más adelante, para otros coches eléctricos e híbridos de la marca alemana.
Con la ayuda de una placa de carga especial y de un automóvil equipado con la tecnología correspondiente, el cable de carga será innecesario. El prototipo mostrado hasta ahora utiliza una placa base con una bobina primaria integrada. La placa de suelo se puede utilizar tanto en un garaje como al aire libre, y puede cargar la batería de iones de litio del coche en combinación con una bobina secundaria instalada en la parte inferior del vehículo. De este modo, se genera un campo alterno magnético entre las dos bobinas, con una salida de hasta 3,2 kW, que puede ser transmitida inductivamente. Y el tiempo de carga total sería de 3 horas y media.
Encontrar los semáforos en verde gracias al sistema Green Light Optimal Speed Advisory, de Ford
La espera en los semáforos en rojo puede ser cosa del pasado gracias a la tecnología Green Light Optimal Speed Advisory, que Ford está ya probando en sus vehículos. Este sistema extrae información sobre los tiempos de los semáforos desde una unidad instalada en las calzadas, facilitando así a los conductores la velocidad óptima para que nunca tengan que detenerse en los semáforos, ya que los encontrarían siempre en verde.
Esta innovación se está realizando para UK Autodrive, el mayor organismo de pruebas de vehículos conectados y conducción autónoma del Reino Unido. Se están probando tecnologías de comunicación de vehículo a vehículo, y de vehículo a infraestructura, con el objetivo de facilitar una conducción más dinámica, menos estresante, favoreciendo la gestión del tiempo y mejorando la eficiencia de combustible.
VISION, el nuevo concepto de neumáticos de Michelin
El pasado mes de junio, Michelin presentaba en el evento Movin’On de Canadá su concepto VISION, un neumático sin aire, conectado, recargable, personalizable y bio en el que convergen todas las tecnologías del grupo para crear un objeto emblemático para la movilidad del mañana, sostenible e inteligente.
VISION aúna cuatro innovaciones principales, aunque incorpora hasta 19 patentes. Por un lado, se trata de un bioneumático, ya que se ha creado a partir de materiales de origen biológico y biodegradables que, a su vez, minimizan la huella medioambiental. En segundo lugar, es un neumático impreso en 3D y recargable, según su desgaste y las necesidades de movilidad. Con la ayuda de impresoras 3D, es posible depositar la cantidad justa de goma en el neumático y, así, prolongar su duración. La estructura de la banda de rodadura se optimiza en función de las necesidades de movilidad (por desgaste, condiciones meteorológicas o de la carretera) para garantizar siempre la movilidad y la profundidad se reduce también para usar menos materias primas.
En tercer lugar, se trata de un neumático sin aire gracias a su arquitectura interior alveolada. Suprime el aire en beneficio de una estructura alveolar capaz de soportar el vehículo, asegurar la solidez de la rueda y garantizar el confort y la seguridad la conducción, así como una larga duración. Además, no puede ni reventarse ni pincharse. Por último, se trata de un neumático conectado, ya que está equipado con sensores que informan en tiempo real sobre el estado de la banda de rodadura.
Estas son solo algunas de las innovaciones tecnológicas que se avecinan, pero estamos seguros de que llegarán muchas más, algunas de ellas tan increíbles como las que incorporaba el DeLorean. Solo es cuestión de tiempo.